El proyecto, ya ha desarrollado dos jornadas exitosas con amplia participación ciudadana reforzando el valor de prácticas sociales típicas de los Antofagastinos y su relación con el borde costero
Tomar té en la playa, leer un interesante libro, juntarse con los amigos a guitarrear, disfrutar de las puestas de sol, son actividades propias e identitarias de todos quienes viven y disfrutan de la arena, el mar, el sol y del litoral antofagastino. Rechangueando, proyecto de innovación social, ganador de la tercera versión del AntofaEmprende y es promocionado y mentoreado por la Universidad Católica del Norte, a través de su proyecto Multihélice de Innovación Social.
Rechangueando, pone en valor el borde costero rocoso y natural de la ciudad, el que fue habitado por los Changos-de allí el nombre,- con el planteamiento de volver habitar estos espacio-al igual que lo hizo este pueblo originario, pero planteando actividades más contemporáneas. Este busca reforzar y poner en valor las prácticas sociales típicas de los Antofagastinos y su relación con el borde costero,
El proyecto desarrollado por Fernando Zúñiga, antropólogo y María José Godoy, socióloga, recoge ese interés ciudadano y genera espacios de esparcimiento, invitando a disfrutar espacios del borde costero ,específicamente del sector Las Almejas , buscando hacer de ellos un lugar único en donde converjan la cultura, la identidad changa, la educación, el ocio y el relajo.
Esta iniciativa, ya ha desarrollado dos jornadas exitosas con una amplia participación ciudadana, habilitando mediante intervenciones lúdicas y significativas, un espacio en la playa que cuenta con una Biblioteca móvil de uso, donaciones e intercambio; un café móvil; cine; música en vivo y otras actividades sociales.
Primeros pasos
Rechangueando, es un espacio de encuentro familiar que nace, a partir de un proyecto desarrollado por estos dos profesionales de las ciencias sociales quienes se adjudicaron recursos de para concretar acciones tendientes a contar a futuro con un centro al aire libre permanente para rescatar la playa Las Almejas y cuyas primeras acciones han sido la reparación del mobiliario urbano en el sector y la habilitación del espacio como lugar de esparcimiento.
La iniciativa, según Fernando Zuñiga, se plantea como una oportunidad, para resolver y hacernos cargo, de la carencia de espacios culturales para el disfrute a nivel familiar, el mal manejo del territorio, el problema de la basura, entre otros objetivos.
Por su parte, María José Godoy, explica que, se definió el espacio de las Almejas porque era un espacio de esparcimiento abandonado producto del desarrollo urbano alrededor, había muchos espacios de activación y este sector quedo sin un uso claro. Entonces el uso que estamos dando es el de un sello ligado a la identidad local, en un espacio de encuentro entre los sujetos y la cultura changa, enmarcada en la “puesta de sol”, como uno de los actos más significativo e identitario de ella.
En las actividades del programa, realizadas en el espacio, se puede disfrutar de sillas, biblioteca, sombra, actividades culturales y un café que es el modelo económico que pretende dar sustento a la gestión de la iniciativa.
A futuro, se espera ampliar estos espacios generando un verdadero centro cultural, que cuente, inclusive, con un museo de la biodiversidad costera al aire libre y un museo interpretativo de la cultura de Los Changos, de manera de difundir y educar a la comunidad sobre la cultura de este pueblo originario que habitó.
Iniciativa Permanente
Y tal como dice su slogan “Rechangueando vino para quedarse” y el termino del verano no implica la finalización de las actividades que desarrollará esta iniciativa. Desde marzo, el espacio de encuentro en la playa, será permanente.
Los sábados y domingos, este espacio estará disponible para la comunidad en lo que corresponde al café y a la Biblioteca durante algunos horarios a confirmar. Las actividades masivas y jornadas de actividades recreativas, que se realizaran a lo largo del año, en tanto, dependerán de los recursos disponibles que el proyecto vaya reuniendo, siendo estas actividades promocionadas igualmente, a través de redes sociales y medios de comunicación.
Ahora los precursores del emprendimiento social, están iniciando gestión de postulación a proyectos para hacer de Rechangueando el primer Centro Cultural al aire libre de la región, que cuente con un museo de la biodiversidad que se presente información en infografías sobre las especies endémicas y toda la diversidad biológica y ecosistemas del sector y un segundo museo interpretativo de la cultura de los Changos que contemplará acciones para levantar un relato educativo de la cultura de los changos que poco se conoce en la ciudad.
En estos momentos, se está creando el Plan Maestro del proyecto. El municipio ya otorgó el uso exclusivo del espacio para fines culturales y sociales y además, otorgó el permiso para el café que es el equipamiento base para la sostenibilidad y sustentación del proyecto y del espacio.